El tiempo pasa volando, cuando te das cuenta tu hijo ya se sienta sólo, ya come comidas, ya empieza a pararse firme, ya ríe a carcajadas, ya balbucea, está aprendiendo a gatear y cada día está más grande. Y entonces te das cuenta que todo está pasando muy rápido y no te da tiempo ni de asimilar... Y empiezas a temer... ¿Por qué? Porque entiendes que un día tu hijo ya no te va nesecitar, ya no dormirá a tu lado, ya no necesitará que le des de comer en la boca y que lo bañés y lo cambies, un día se irá de la casa para formar su propia familia y de tan solo imaginarlo se me estremece la piel, porque ahora no me imagino mi vida sin mi hijo. Alguna vez han visto a una persona vivir sin un corazón? Así mismo creo que una madre no podría vivir sin su hijo, es lo que pienso porque ese es mi caso...